Nuestra Parroquia...
El 16 de Julio de 1662, en lo que actualmente es la esquina de Av. Irarrázaval con Francisco Molina se fundó la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, que hoy es la tercera en antigüedad en el país, después de la Parroquia El Sagrario, de 1546 y la Parroquia Santa Ana de 1578. Para aquel entonces, Chile aún no existía y los territorios que hoy están bajo soberanía nacional pertenecían al Virreinato del Perú.La parroquia Nuestra Señora del Carmen de Ñuñoa debe su importancia urbana a que fue siempre un territorio “extramuros” en cuanto a los límites territoriales de la ciudad de Santiago. La superficie de límite parroquial (distinto a límite de superficie predial), fueron los geográficos: el río Mapocho y el cerro San Cristobal y Manquehue por el norte, la cordillera de Los Andes por el oriente, el río Maipo por el sur, y el poniente con las incipientes manzanas trazadas de Santiago centro a mediados del siglo XV . En tal sentido la parroquia es un hito histórico y urbano que indica la expansión urbana de la ciudad hacia la cordillera y cuya importancia geográfica y urbana sobresale debido al destino de uso religioso asociado que le dio su origen.
La localización de la parroquia está a metros del antiguo Camino de Ñuñoa (Avda. Irarrázaval, calzada que junto al camino de Las Condes y al camino del Inca (posteriores ejes Alameda Providencia y av. Independencia), correspondió a un eje vial fundante del asentamiento urbano de la ciudad de Santiago sentido oriente-poniente cordillera-mar. La parroquia es un hito de la conformación de la ciudad hacia el oriente y es contemporánea a los primeros asentamientos de ciudad en el sector.
La parroquia estaba dentro de la “Doctrina del Rosario” y comprendía 1.692 personas, 57 chacras y 1 pueblo de Indios en Macul, donde habían 36 indígenas encomendados a don José de Ureta, abogado y oidor de la Real Audiencia de Santiago (Francisco de Solano, Relaciones Económicas del Reyno de Chile, 1780). Desde el siglo XVII se establece como el centro físico de misión católica, jurisdicción que se subdivide entrado el siglo XVIII en cuatro “vice-parroquias” (Macul, Vitacura, Apoquindo y Peñalolén). En 1802 el párroco Enrique Buenaventura Camus adquiere la propiedad donde actualmente se edificó el actual edificio templo.
Su construcción fue llevada a cabo desde 1925 por el arquitecto Eugénne Joannon y Gustavo Monckeberg, y se erigió a partir de un sistema de hormigón armado y albañilería reforzada que dieron forma a fundaciones, cimientos, sobre cimientos, muros perimetrales y arbotantes coincidiendo con una imagen proyectada asociada al movimiento clásico como parte del románico tardío.
La estructura de los muros y arbotantes laterales norte y sur dejan parte de su materialidad a la vista mostrando en bruto hiladas de ladrillos y volúmenes de mezclas de hormigón solidificados sin estucar produciendo relieves rugosos que dan cuenta de la construcción llevada a cabo para el sostén de la obra. Por otro lado, a modo de contrapunto hacia el interior del templo mayor podemos vislumbrar pilastras, arcos ojivales, bóveda ojival, y muros perimetrales con total acabado cubriendo la estructura de hormigón, albañilería reforzada y acero de muros, techumbres y pilares a partir de una textura lisa y homogénea de envolvente interior.
El Templo, que cuenta con una capacidad para 600 personas, en los terremotos de los años 1985 y 2010 sufrió importantes daños, pero gracias a los aportes del pueblo fiel, logró ponerse de pie.
